Es ampliamente aceptado que los adolescentes están predispuestos a disfrutar de comportamientos de riesgo, más aún que los adultos. Investigadores del Instituto Max Planck para el desarrollo humano recientemente nos han proporcionado nuevas penetraciones en las razones subyacentes de tales riesgos.

El estudio encontró que, comparado con adultos y niños, los adolescentes están mucho menos interesadas en, mucho menos motivadas a buscar y mucho más capaces de tolerar una falta de comprensión de la información útil para medir los riesgos de ciertas prácticas.

El autor en los comentarios del proyecto: "no es que [los adolescentes] son cognitivamente incapaces de procesar las cuestiones. Ellos son simplemente impulsados a buscar nuevas experiencias y probar cosas nuevas." Esta conclusión puede explicar por qué a menudo no se sigue con el asesoramiento de campañas de información enfocado en educar a los jóvenes sobre los peligros del consumo de drogas. El coautor del estudio, por lo tanto, advierte: "Si realmente queremos llegar a los jóvenes, necesitamos tomar estas ideas en cuenta al diseñar las intervenciones". Una de esas formas, añade, sería ofrecer a los adolescentes la oportunidad de aprender acerca de las consecuencias de sus comportamientos de riesgo en los entornos virtuales.

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